Mostrando entradas con la etiqueta comecuras. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta comecuras. Mostrar todas las entradas

01 enero 2011

[Breves] La UNESCO y sus malvados planes

Para conspiraciones las del obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, en una homilía en la Catedral de Córdoba, el pasado 26 de diciembre de 2010:
El “ministro” de la familia en el gobierno del Papa, el cardenal Antonelli, me comentaba hace pocos días en Zaragoza que la UNESCO tiene programado para los próximos 20 años hacer que la mitad de la población mundial sea homosexual. Para eso, a través de distintos programas, irá implantando la ideología de género, que ya está presente en nuestras escuelas.
¿No se lo pueden creer? Lean la homilía en una fuente no sospechosa. Ahí don Demetrio nos desvela entre otras cosas como cambiarse de sexo sin esfuerzo:
Según la ideología de género [impuesta por la UNESCO en las escuelas], uno no nacería varón o mujer, sino que lo elige según su capricho, y podrá cambiar de sexo cuando quiera según su antojo.
Hay más cosas jugosas como, por ejemplo, plantear que el divorcio va contra un supuesto "proyecto de Dios", olvidando que el divorcio que critican afecta solamente al matrimonio civil que, por otra parte, la iglesia católica rechaza porque no es sacramental. Coherencia ante todo.
Es una pena que no me enterara de esto hace unos días, hubiera colado perfectamente como inocentada. Lo que ya no es tan gracioso es tener a esta gente arengando en los púlpitos en este décimo año del siglo XXI.

24 enero 2009

¿Libertad de expresión?

La Conferencia Episcopal Española está a favor de la libertad de expresión y el derecho a la libertad religiosa. Pero parece que sólo de la suya. Dicen en su página web:

La libertad de expresión es un derecho fundamental. Todos pueden ejercerlo por medios lícitos. Pero los espacios públicos que deben ser utilizados de modo obligado por los ciudadanos no deben ser empleados para publicitar mensajes que ofenden las convicciones religiosas de muchos de ellos. Si se hace así, se lesiona el derecho al ejercicio libre de la religión, que debe ser posible sin que nadie se vea necesariamente menospreciado o atacado.

Insinuar que Dios probablemente sea una invención de los creyentes y afirmar además que no les deja vivir en paz ni disfrutar de la vida, es objetivamente una blasfemia y una ofensa a los que creen.

En mi simpleza entiendo que dudar de la existencia de Dios jamás puede ser un insulto a nadie. Tú crees y lo dices, yo no creo y lo digo, así de simple. Es como si dudar de que los OVNIS sean visitas extraterrestres fuera una ofensa a los que así lo creen. Menos aún puede ser una lesión al “libre ejercicio de la religión”. ¿O es que esos carteles impiden a alguien ir a misa los domingos?

¿Qué piden los obispos como solución a la afrenta? Lean:

Las autoridades competentes deberían tutelar el ejercicio pleno del derecho de libertad religiosa. Es posible hacerlo compaginándolo al mismo tiempo con el amparo y la promoción de la libertad de expresión de todos. Así lo muestra el modo en que se ha procedido en ciudades como Roma, Milán o Zaragoza.

¿Qué ha pasado en esas ciudades “modelo de ejercicio pleno del derecho de libertad religiosa”? En Milán y Roma lo ignoro pero el caso de Zaragoza es claro: tanto el alcalde socialista Juan Alberto Belloch como la empresa concesionaria de los transportes urbanos se han negado a contratar los anuncios. Ese es el modelo de "libertad de expresión de todos" según los obispos.

Respecto a la frase "los espacios públicos que deben ser utilizados de modo obligado por los ciudadanos no deben ser empleados para publicitar mensajes que ofenden las convicciones religiosas de muchos de ellos" se me ocurre que no estaría de más que la Conferencia Episcopal recordara, por poner un ejemplo, cuando los espacios públicos son ocupados por las procesiones de Semana Santa, obligando a los no creyentes y a los creyentes en otras religiones a recibir su propaganda religiosa, visual y sonora, incluyendo escenas explícitas de tortura y muerte. Eso sí tenemos que soportarlo sin rechistar, claro, en aras de la "libertad de expresión de todos".

Procesión en una vía pública con acompañamiento de la Policía Municipal en León, 2007 (tomada de Wikimedia).

En fin, una pataleta a la altura justa de la catadura de los redactores de la nota para los cuales la libertad de expresión sólo es un derecho cuando les hace coro. Por cierto, ayer, volviendo a mi casa, vi la primera pegatina en un coche particular. Decía “Dios existe. Vive la vida en pleno gozo en Cristo Jesús”. Me pareció un ejercicio de libre expresión un tanto esotérico, no voy a negarlo, pero no un insulto.

En Italia, allá donde les dejen ponerla, la frase es diferente y, en mi opinión, más certera: La mala noticia es que Dios no existe. La buena es que no hay necesidad.

Grab this Widget ~ Blogger Accessories
 
º