Donde retomamos con más detalle el asunto del psicoanálisis a ver si nos aclaramos entre todos sobre su lugar en la estantería
En una entrada del mes pasado hice la siguiente afirmación:“Otras pseudociencias son extremadamente populares en algunos países, como el psicoanálisis, derivado de los delirios de Sigmund Freud y que no tiene base objetiva alguna.”En uno de los comentarios, patomeneses me llama amablemente al orden y me dice lo siguiente:
“Con respecto al psicoanálisis, se hace evidente que no te has documentado lo suficiente como para poder afirmar que la disciplina es una pseudociencia derivada de los delirios de Freud y que no tiene base objetiva.Estoy de acuerdo con la primera frase en términos genéricos: nunca se documenta uno lo suficiente si “lo suficiente” significa completamente. Aún así, intentaré justificar mi frase contestando con un poco de orden.
1) Dor, un psicoanalista contemporáneo afirmará con toda precisión: el psicoanálisis no es una ciencia, y tampoco pretende serlo. Por lo tanto, difícilmente se la puede clasificar como pseudo ciencia, con todo el significado peyorativo que esa noción supone.
2) ¿Bajo que disciplina afirmas que todo el pensamiento freudiano es un delirio? Sería interesante saber -ya que hablamos de ciencia- como fue que esto se comprobó.
3) La objetividad es siempre un supuesto a priori. Hasta los físicos cuánticos lo afirman!”
[Cuestión 1] Si Joel Dor afirma que el psicoanálisis no es una ciencia (estoy de acuerdo) y que no pretende serlo (esto ya me preocupa más), ni tampoco una pseudociencia ¿qué es entonces el psicoanálisis? Es que no tengo muchos más archivadores donde meter las cosas. Quedaría disponible el cajón de las pre o protociencias, donde entran aquellas disciplinas emergentes que aún no han conseguido un corpus sólido pero que van camino de ello. Pero temo que tampoco don Joel aceptará esto porque implica una vocación de ciencia. No sé, entonces, qué aclara la no pertenencia a nada.
Tampoco estoy nada seguro que la comunidad psicoanalítica acepte de buen grado y mayoritariamente que su disciplina no es ni tiene vocación de ser una ciencia. Tal vez algunas de las escuelas psicoanalíticas se hayan salido de las intenciones originales pero Freud redactó en 1895 un "Proyecto de una psicología para neurólogos" donde deja claras sus intenciones. La primera frase del documento dice:
"La finalidad de este proyecto es la de estructurar una Psicología que sea una Ciencia Natural, es decir, representar los procesos psíquicos como estados cuantitativamente determinados de partículas materiales especificables, dando así a esos procesos un carácter concreto e inequívoco". (Sigmund Freud, Obras Completas, Ed. Biblioteca Nueva, Madrid, vol. 1, p. 211).Para mí está bastante clara la intención de don Sigmundo de que su obra debía encuadrarse dentro de las disciplinas científicas, supongo que con todo lo ello supone. Podría achacarse a que esta obra es del Freud más joven pero mantuvo esta visión hasta sus últimos días. Por ejemplo, en “Algunas lecciones elementales de psicoanálisis” (1938) dice “El psicoanálisis es una parte de la psicología” y un par de párrafos más adelante “La psicologia también es una ciencia natural ¿Qué otra cosa puede ser?” (Obra citada, vol. 9, p. 3420).
No he localizado textos de Joel Dor pero su actitud parece más una huída hacia adelante, un romper la baraja. Él sabrá sus motivos pero así se pone en la frikilandia del conocimiento.
[Cuestión 2] Mi expresión “delirio” es una licencia excesiva. Retiro por tanto la palabra y la sustituyo por algo más preciso como elucubración, por ejemplo:
elucubrar. (Del lat. elucubrāre).No se ha comprobado científicamente nada porque el psicoanálisis no cumple principios básicos de la ciencia, entre ellos, proponer hipótesis comprobables. No hace propuestas que puedan ser sometidas a pruebas experimentales. Maneja conceptos extraordinariamente vagos, desde los más básicos (ego, ello, superego) hasta los que deberían ser más concretos (trauma, por ejemplo). Incluso a veces la música me suena a dualista, como defendiendo la dicotomía cuerpo-espíritu, pero eso es sólo una impresión. Les pongo un ejemplo, así define Jacques Lacan el inconsciente:
1. Elaborar una divagación complicada y con apariencia de profundidad.
2. Imaginar sin mucho fundamento.
"El inconsciente es la suma de los efectos de la palabra sobre un sujeto, en el nivel en que el sujeto se constituye por los efectos del significante. Esto deja bien sentado que con el término sujeto no designamos el sustrato viviente necesario para el fenómeno subjetivo, ni ninguna especie de sustancia, ni ningún ser del conocimiento en su patía, segunda o primitiva, ni siquiera el logos encarnado en alguna parte, sino el sujeto cartesiano, que aparece en el momento en que la duda se reconoce como certeza - solo que con nuestra manera de abordarlo, los fundamentos de ese sujeto se revelan mucho mas amplios y, por consiguiente mucho mas sumisos, en cuan a la certeza que yerra. Eso es el inconsciente."Y francamente, este tipo de verborrea es, al menos para mí, un clarísimo ejemplo de texto hermético. ¿Cómo diablos vamos a someter a prueba experimental esta definición? ¿Cómo vamos a comprobar empíricamente que es ese subconsciente el que se manifiesta en los sueños, por ejemplo si no somos capaces ni de dar una definición comprensible? Por cierto, que eso deberían hacerlo los psicoanalistas. No me cargue a mi con la prueba porque entonces estamos cayendo en una falacia de libro, el argumento ad ignorantiam.
Comprobar mediante experimentación que mantenerse a salvo de los peligros mediante la angustia es una misión del yo y no del ello es como comprobar que los ajos son estupendos contra los vampiros. Proporcióneme usted una muestra suficientemente amplia de vampiros y podremos empezar a hablar. Pero no, según los practicantes, lo anterior no es una hipótesis, es un teorema.
[Cuestión 3] No hay que sacar los conceptos de su sitio. Lo objetivo es lo que no depende del juicio u opinión del observador. En la mecánica cuántica se producen efectos extraordinariamente llamativos que manifiestan la imposibilidad de medir algo sin afectarlo pero eso no ocurre a escalas macroscópicas. Lo mismo se puede medir la reflectancia del terreno desde un satélite sin provocar perturbación alguna, como determinar objetivamente la eficacia de un antibiótico mediante ensayos clínicos bien diseñados. Y esos resultados serán obtenidos por cualquiera que repita la cosa. Lo que quiero decir sobre el psicoanálisis es que los juicios diagnósticos son tan dependientes de la interpretación del psicoanalista y los conceptos y relaciones causa-efecto son tan sensibles que no permiten la condición de repetibilidad, requisito necesario para tomar algo en serio.
Finalizo recordando que en los últimos 100 años la biología, la genética, la física, la medicina, las tecnologías... han avanzado tanto que da vértigo mirar atrás. No sé donde están los avances del psicoanálisis.